Este blog entra en la adolescencia. Hoy cumplimos 13 años, edad en la que algunos progenitores echan a temblar. Vosotros podéis estar tranquilos, auguramos una pubertad asumible.
En cualquier caso, la celebración es de todos, sin vosotros, este blog no hubiera llegado a la edad de las contradicciones.
¡Muchas gracias! No olvidéis que os esperamos, siempre, con los libros abiertos.