El camino, Miguel Delibes, Destino, 2000.
En diciembre del pasado año publicamos el Reto de lectura 2025. El reto de agosto consiste en leer una novela con protagonistas jóvenes, y Gonzalo Romo lo ha cumplido con esta novela de iniciación. ¡Muchas gracias por participar!
El hecho de que sea una de las pocas novelas que he releído por iniciativa propia ya dice mucho sobre lo que me gusta este libro y cuánto lo recomiendo.
Se trata de un retrato en movimiento de la vida de un pueblo. Toda la historia transcurre en una sola noche, la previa a la partida de Daniel, “el Mochuelo”. Incapaz de dormir, Daniel repasa su vida y la de los habitantes de su pueblo, como una manera de despedirse de su infancia.
Es mi novela favorita de Delibes y también la primera que leí de este autor. Hay dos razones principales por las que se ha convertido en mi preferida:
Por un lado, el humor. Gracias a él se conecta de inmediato con los personajes y se disfruta acompañando a Daniel en su recorrido por el valle. Además, Delibes sabe equilibrar esa ligereza con temas profundos y delicados como el suicidio, la muerte o los prejuicios. Hay que tener en cuenta, además, que la obra fue escrita en pleno franquismo, eludiendo la censura, lo que constituye un mérito en sí mismo.
Por otro lado, la cercanía personal. Paso los veranos en un pueblo del norte de Granada, de donde eran mis abuelos. Aunque Delibes se inspiró en Castilla, los pueblos de España comparten rasgos muy similares en su forma de ser, por lo que la historia me resulta especialmente próxima y familiar.
En definitiva, si eres de un pueblo pequeño o tienes algún vínculo con él, te invito a leer El camino: estoy segura de que llegará a tu corazón.
