Clara Fernández-Ladreda Aguade (Oviedo, 1955). Licenciada en Historia por la Universidad de Navarra, donde se doctoró con una tesis sobre la Imaginería medieval mariana en Navarra, publicada posteriormente por el Gobierno de Navarra. Ha trabajado como docente en la Universidad de Navarra desde 1978, donde ha impartido fundamentalmente las materias de Arte antiguo, Arte clásico y Arte medieval, tanto europeo como hispánico.
Sus investigaciones se han centrado básicamente en la imaginería medieval y el arte medieval navarro románico y gótico, temas sobre los que tiene numerosas publicaciones, entre las que cabe citarlos los dos volúmenes de la colección de arte navarro, Arte románico en Navarra y Arte gótico en Navarra, de los que fue directora. Ha dirigido varias tesis doctorales sobre arte medieval navarro. Comisarió -junto con Concepción García Gaínza- de la exposición «Salve, 700 años de Arte y Devoción mariana en Navarra», que tuvo lugar en 1995. Subcomisarió la exposición “La Edad de un Reyno. Las encrucijadas de la Corona y la Diócesis de Pamplona”, celebrada en Pamplona en 2006.
Entre sus aficiones destacan la lectura y los viajes, siempre a destinos culturales, aunque en el futuro espero dedicarme también a la jardinería.

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• ¿Con qué libros comenzó su experiencia lectora?

Hasta donde soy consciente, con una colección de biografías de personajes históricos que me regaló un tío mío, pero de niña leí mucho a Emilio Salgari y Enid Blyton, y más tarde a Agatha Christie.  

• ¿Qué supone la lectura para usted?

Una auténtica pasión, aprovecho cualquier oportunidad para leer. Salvo cuando estoy de viaje o muy agobiada por el trabajo, leo todos los días un rato.

• ¿Cuál es su libro favorito y por qué?

A riesgo de parecer pedante, la Biblia, por su variedad, pues si se considera desde el punto de vista literario puede decirse que tiene de todo -historia, poesía, drama, humor, etc.- y de hecho ha servido como fuente de inspiración a muchos escritores. De todos modos, mis gustos son muy variados: me gusta la biografía y el ensayo histórico, el teatro español del Siglo de Oro, el teatro francés del XVII, la literatura inglesa del XIX, pero también la novela histórica y la novela de intriga

• A un alumno que no lee más allá de la bibliografía curricular, ¿cómo le animaría a que lo hiciera?

Le recomendaría que empezara tanteando para ver cual es su género favorito -libros de viajes, de aventura, de ciencia-ficción, novela histórica o de intriga, biografía, etc- y, una vez que lo descubra, que siga por ese camino. Es muy importante que lo que empiece leyendo le resulte divertido, aunque no sea “alta literatura”, porque si se aburre lo dejará y es posible que no vuelva más. Una vez que se haya aficionado, sus gustos irán evolucionando y pasará a cosas más serias.

• ¿Qué papel cree que juega la literatura en la formación humanística de los universitarios hoy en día?

Actualmente, por desgracia, muy escaso. Sobre este punto quiero insistir en el papel del ejemplo, en concreto dentro de la familia. Si un niño ve que sus padres leen habitualmente, es fácil que él mismo empiece a leer. En mi caso, me influyó muchísimo mi padre, gran aficionado a la lectura; la cosa, además, tiene su miga, porque era ciego, pero eso no fue un obstáculo, pues recurría a un servicio de la ONCE, el “libro hablado” -grabaciones de libros de todo tipo-, o hacía que le leyera alguien, primero mi madre y, luego, en cuanto aprendí a leer, yo misma.   

• ¿Lee en papel o en formato digital?

 En papel, aunque supongo que eso viene condicionado por la generación a la que pertenezco y, en cualquier caso, es secundario. Lo fundamental es leer

• ¿Cómo ha influido la lectura en su vocación docente e investigadora?

En la colección de biografías que mencioné al principio como una de mis primeras lecturas, recuerdo que había dos, una de Isabel la Católica y otra de El Cid, que me encantaron. Desde que las leí, sin ser quizás muy consciente, decidí dedicarme a la Historia y en concreto a la época medieval, aunque al final esto se matizó y acabé en la historia del arte medieval.  

• En su opinión, ¿qué necesita una buena biblioteca para serlo?

 Un personal bien formado, con criterio, pues hoy en día se publica muchísimo y como no se puede -ni debe- adquirir todo, hay que saber seleccionar. También conviene prestar atención a las demandas de los usuarios. 

• Usted que ha sido testigo de tantos cambios en la Biblioteca de la Universidad de Navarra, ¿qué es lo que más le ha impresionado?

La Biblioteca tiene muchas cosas positivas, pero creo que lo mejor es su personal, tanto bibliotecarias y bibliotecarios como bedeles. Son profesionales excelentes y de una amabilidad y una paciencia exquisita. Y esto no lo digo ahora, motivada por el contexto de la encuesta, pues en varias ocasiones a lo largo de mi vida escribí a Rectorado para alabar el funcionamiento de la Biblioteca y de su personal. 

• Si pudiese ser un libro … ¿cuál sería y por qué?

Es una pregunta difícil, pero en fin… Creo que me gustaría ser El bosque de la larga espera, una novela histórica de la holandesa Hella Haase, pues me parece que recrea magistralmente un periodo de la Edad Media que para mí resulta fascinante, la etapa final, y por otro desarrolla magníficamente la trayectoria vital de un personaje muy interesante y complejo, el poeta Luis de Orleans

• Y para terminar, un deseo bibliotecario, una certeza lectora y un sueño editorial. 

Un deseo bibliotecario. Recientemente he podido comprobar, a través de contactos con algún alumno extranjero, que lo que en España consideramos normal, ya existen bibliotecas públicas por todas partes e incluso en núcleos de población reducidos, no lo es tanto. Hay países donde el acceso a los libros es problemático. Me gustaría que esto no fuera así y que en todas partes hubiera bibliotecas públicas bien dotadas.

Una certeza lectora: la lectura, bien elegida, es una fuente inmensa de felicidad.

Un sueño editorial: aunque sea un tema menor, me gustaría que se editara un resumen en un único tomo de los varios volúmenes sobre Arte navarro publicados por el gobierno de Navarra.

Muchas gracias por esta estupenda entrevista.